lunes, 2 de noviembre de 2009

Recientemente he recibido un dossier de prensa en el que quedan recogidas una serie de noticias a cerca de la violencia creciente de los hijos hacia los padres. Resulta tremendo que esto haya llegado hasta este nivel, donde las familia tienen que pedir protección para defenderse de sus propios hijos y donde las autoridades administrativas y jurídicas tienen que mediar para evitar estas agresiones. Parece ser que el valor del respeto hacia los mayores (que no el miedo), tiene sus días contados. Pero aun no es tarde ya que la mayoría de los hijos no están incluidos en este grupo, de momento reducido, y los que forman parte de él disponen de medios para recuperar el camino.
En mi opinión algunas familias creen que cuando reprenden, castigan o niegan algo a sus hijos les estan limitando su derecho a la felicidad. Pero a veces estas limitaciones o privaciones les ayudan a superar frustraciones necesarias para su desarrollo y crecimiento personal. Les ayudan a conocer los límites, respetar las opiniones y deseos de los otros, establecer una jerarquización necesaria en el trato con los demás (padres, madres, profesores-as, compañeros-as, futuras parejas, jefes-as, subordinados-as), etc.
Nuestros hijos e hijas son lo más querido, por ello debemos proporcionarles todas las herramientas necesarias para enfrentarse al mundo exterior, donde no podemos protegerlos. Esas herramientas (autoconocimiento, esfuerzo, constancia, perseverancia, sacrificio, etc, etc, etc), estan contenidas en una caja enorme que se llama respeto a los demás y a ellos mismos. El respeto empieza a materializarse en casa con los más próximos, en la escuela con los iguales y por último en la calle con los desconocidos. Por ello la familia es fundamental para reforzar este valor impescindible para la convivencia.
Adjunto un enlace a los recortes de prensa a los que anteriormente he hecho referencia, espero que los encontréis interesante.

http://www.ciimu.org/uploads/20091028/recull_premsa_fills_vs_pares.pdf

Un saludo
MªÁngeles